Centella asiática: el secreto ancestral que regenera tu piel

La centella asiática, también conocida como gotu kola o "hierba del tigre", es una planta originaria de Asia que ha sido utilizada durante siglos en la medicina ayurvédica y tradicional china. Su apodo proviene de una leyenda según la cual los tigres heridos se revolcaban en ella para curar sus heridas. No es casualidad: sus propiedades regeneradoras están más que respaldadas por la ciencia moderna.

Beneficios para tu piel

Este extracto botánico es un verdadero cóctel de activos reparadores que la piel agradece desde la primera aplicación:

Estimula la producción de colágeno, lo que mejora la elasticidad y firmeza cutánea.

Acelera la cicatrización y ayuda a reparar pieles dañadas o sensibles.

Reduce la inflamación y el enrojecimiento, calmando la piel reactiva.

Hidrata y protege, favoreciendo una barrera cutánea más fuerte.

Tiene un potente efecto antioxidante, ideal para combatir el estrés oxidativo y el envejecimiento prematuro.

¿Por qué la usamos en Amakandu?

En Amakandu creemos en una belleza que respeta la piel, el entorno y las raíces culturales de los ingredientes que usamos. La centella asiática representa esta visión:

  • Es natural y ecológica.
  • Tiene efectos reales, no promesas vacías.
  • Y conecta con una sabiduría ancestral que nos inspira a cuidar nuestra piel con respeto y conocimiento.

En nuestro bálsamo facial, la centella asiática actúa en sinergia con aceites ecológicos de alta calidad como el de argán, granada o jojoba, creando una fórmula rica, nutritiva y reparadora sin comprometer la pureza del producto.