El saúco es un árbol pequeño que crece en varias regiones del mundo, que se caracteriza por su tallo color grisáceo y sus abundantes flores blancas que desprenden un olor muy agradable. Esta planta puede producir hasta 200 flores de entre 4 y 8 mm de diámetro.
En España podemos encontrar el saúco en todas las regiones si bien escasea en la zona sur salvo en zonas montañosas. Su floración se produce entre los meses de abril y junio.
Existen varias especies de saúco y la más abundante en España es la sambucus nigra o saúco negro.
Del saúco negro se utiliza principalmente en cosmética el aceite que proviene de sus semillas negras ya que tiene propiedades antiinflamatorias y calmantes siendo ideal para tratar la dermatitis y especialmente indicado para pieles sensibles.
Es apto tanto para pieles grasas como secas ya que es un aceite ligero y no graso.
Se absorbe de forma rápida y regenera la piel siendo una apuesta segura para todas aquellas personas con problemas cutáneos como por ejemplo la psoriasis y otras enfermedades inflamatorias de la piel.
Es un ingrediente natural muy versátil y beneficioso para la salud de la piel:
- Con propiedades antioxidantes que ayudan a combatir los radicales libres, prevenir el daño celular y mantener la piel joven y saludable.
- Con ácido gálico, que es conocido por su capacidad para combatir los signos del envejecimiento.
- Con vitamina E que ayuda a proteger la piel de los rayos UV dañinos del sol.